lunes, 11 de enero de 2010

El Proceso del Tapete/ Por Abraham-Hicks

El Proceso del Tapete

Por Abraham-Hicks

Sus deseos no siempre son recibidos rápidamente por una sola razón. No están en armonía vibracional con su propio deseo. Usualmente significa que lo que desean y lo que creen actualmente sobre ello no coinciden a nivel vibratorio.

Digamos que desean que fluyan más dólares a su experiencia, pero el hábito de pensamiento que han desarrollado o aprendido de otros dice que no hay suficientes dólares. Desde que eran niños, viviendo con sus padres, han aceptado que no hay suficientes dólares. Y entonces ahora, cuando hacen su declaración de deseo, el hábito vibracional de pensamiento (o su creencia) habla en exacta oposición a su deseo.


Otro ejemplo: Tienen muchas cosas que planean hacer hoy. Su lista es muy larga. Esas son cosas que en realidad necesitan hacer para mantener su vida avanzando de manera productiva. Pero cuando hacen su lista de cosas que desean lograr, su creencia dice “No tengo tiempo para hacer todo esto.” o “No estoy preparado para hacer esto, no sé como hacerlo.” Su deseo tiene una vibración pero su hábito de pensamiento se opone a ella, entonces sin importar cuanta acción ofrezcan, no progresan demasiado hacia su deseo.

Al utilizar el “Proceso del tapete” [Proceso 10 en "Pide y se te dará: Cuaderno de trabajo"] descubrirán más armonía vibracional entre sus deseos y sus creencias. Cuando delegan al Universo algunas de las cosas que desean, dejan afuera su hábito de pensamiento que se opone. Cuando le asignan al Universo algo como, “Universo, por favor organiza un desenlace feliz para tal y tal situación.” no incluyen sentimientos de no saber como organizar un desenlace feliz. Este proceso les ayuda a ofrecer una vibración que es más pura y más en armonía vibracional con sus propios deseos.

Extraído del taller del 27 de octubre de 1996
(C) Abraham-Hicks Publications
http://www.abraham-hicks.com/
Traductor: Fernando C. nfcs.lda@gmail.com

Son amados - Todo está bien
“La base de tu vida es la libertad absoluta, la meta es la alegría, y el resultado de esta perfecta combinación es movimiento hacia adelante o crecimiento.” (Abraham)


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